La economía del país está paralizada y al borde de la recesión, se perdieron empleos, el 2020 inició con una crisis en los hospitales públicos por el desabasto de medicamentos, tras la apresurada desaparición del Seguro Popular y la pésima implementación del nuevo Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi).Aunque con muchas deficiencias, el Seguro Popular había funcionado para dar cobertura a la población más pobre y el presidente López Obrador decidió sustituirlo.Acusó de sabotaje a las empresas farmacéuticas para justificar el desabasto de medicinas que hubo a inicios de su gobierno porque los funcionarios no supieron realizar las licitaciones para su compra.
Después denunció una presunta conspiración para darle un supuesto Golpe de Estado con un documento denominado BOA con tal de sacudirse las críticas que surgen a diario por su pésimo desempeño.
Ante estos problemas, el presidente recurre a trucos mediáticos.Por ejemplo, difunde un video en sus redes sociales donde cuenta que se le ponchó una llanta a su camioneta durante una gira de trabajo, recientemente se le ve en un video promocionando la venta de los boletos para la rifa del avión.Y la conversación se desvía hacia allá.
En el fondo, lo que quiere el gobierno con estos distractores es que la gente normalice la desgracia y se resigne ante la incapacidad por combatir eficientemente el covic-19, en la cual México ha superado a otras naciones al grado que ocupa los primeros lugares con más muertos en el mundo.
Está claro que López Obrador busca que se hable de otros temas y no del número de contagios y defunciones por la pandemia, en la escasez de equipos y material para el personal médico, en los millones de personas que han perdido sus fuentes de ingresos o en los crecientes niveles de inseguridad y violencia.
Las elecciones de 2021 se acercan cada día más y la Cuarta Transformación no encuentra cómo convencer a los mexicanos que ellos son los mejores gobernantes de la historia; por eso se han dedicado a acatar a todos los opositores políticos, utilizando a la ley como garrote para mantener sumisos a sus adversarios y a todo aquel que no esté de acuerdo con las políticas mal diseñadas y más aplicadas por la 4T.
AMLO y Morena están ejecutando en estos días una desproporcionada campaña de difamación en contra del Movimiento Antorchista.Es un ataque que se compone en su totalidad de mentiras, algunas escandalosas y hasta verdaderamente absurdas; han movilizado un avasallador aparato de propaganda contra de los dirigentes de nuestra organización abusando de los cargos y del poder público del que ahora gozan.
Los antorchistas somos como la peste para la 4T, mientras que para el pueblo somos la esperanza de un futuro mejor y ese es nuestro delito, ese es el origen de los ataques contra Antorcha.Los antorchistas somos inocentes de todo aquello de lo que se nos acusa y los que nos acusan deberían demostrar con pruebas, pero no lo harán porque a nuestros dirigentes nunca los verán en video-escándalos recibiendo "sobres amarillos".En esta campaña de lodo, saldremos de pie y más fortalecidos.
Llamamos a los antorchistas de todo el país a que nos preparemos para defender a nuestros dirigentes, son hombres y mujeres honrados, que han dedicado su vida a la lucha de la gente pobre, y a los bienes de Antorcha que por muchos años hemos venido construyendo con mucho esfuerzo y que es de todos nosotros.
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