Morena es un desastre y una tragedia para México. Es el reflejo de todo lo que criticó, pero potenciado. Si se habla de corrupción, hay más corrupción en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador; si se habla de inseguridad, hay más muertos y masacres en este gobierno que antes; si hablamos de crisis económicas, ahora hemos sufrido la inflación más alta que en muchos años; si se habla de transparencia, este gobierno es el más opaco de la historia reciente; si hablamos de salud al estilo de los países nórdicos somos el quinto país del mundo que tiene más muertes registradas por covid-19 por la ineptitud de este gobierno: 333,490, por encima nuestro está Rusia, India, Brasil y Estados Unidos; si hablamos de escándalos familiares, se conoce el de los hermanos del presidente recibiendo dinero en efectivo, o el tema de la casa de Huston que claramente representa un conflicto de interés en tanto la empresa dueña de la casa donde vivía el hijo del presidente tiene contratos con la paraestatal Pemex, entre otras lindezas.
A ello debemos agregar que Morena no sabe gobernar, lo cual se refleja en los siguientes indicadores: primero, la cancelación irracional de la construcción del aeropuerto de Texcoco, a cambio de un mamut blanco, con el conque de que nos saldría más barato; sin embargo, ahora estamos pagando el de Texcoco y el de Santa Lucía, pues no es viable económicamente y, finalmente, se nota un claro deterioro del aeropuerto Benito Juárez, de la Ciudad de México.
Segundo, este gobierno destinó todos los recursos públicos a tres obras inútiles: el aeropuerto de Santa Lucía, el Tren Maya y la refinería de Dos Bocas. Pues ninguna de estas va a servir para detonar el desarrollo. Dos ya están inauguradas y una mal sirve y la otra no sirve. Efectivamente, aunque ya está inaugurado el Aeropuerto de Santa Lucía, tiene un promedio de 30 vuelos por día y los destinos por mes son como sigue: Cancún, 42 vuelos; Monterrey, 28 vuelos; Guadalajara, 28 vuelos; Mérida, 18 vuelos y Puerto Vallarta, 17 vuelos[1]. Un fracaso.
Por su parte, la refinería de Dos Bocas está inaugurada, pero sigue sin refinar gasolina, lo cual significa otro fracaso, pues hasta ahora el presupuesto destinado a esa obra es de 153 mil 600 millones de pesos, poco más de tres veces por encima de lo planificado, que fueron 47 mil 200 millones de pesos. El Tren Maya, además de no respetar los principios de la austeridad republicana, pues la obra pasó de 63 mil millones de pesos a 95 mil, y de que se dijo que no se tocaría ningún árbol; es sabido el desastre que ha provocado la obra a la selva, a los vestigios arqueológicos y a algunos cenotes que corren riesgo por el capricho de hacer la obra y sigue ésta sin terminar, pero ha de beneficiar a los más ricos y nada más.
Tercero, el fracaso de la política de abrazos, no balazos de este gobierno, pues con información del periódico El Economista, resulta que con Felipe Calderón, en todo su sexenio hubo 121 mil 613 víctimas por homicidio; con Peña Nieto subieron a 157 mil 158 en todo su sexenio; sin embargo, en lo que va de AMLO el número de víctimas es de 137 mil 603, más que con Calderón y, aunque menos que con Peña Nieto, pero a sólo 20 mil de alcanzarlo, con la diferencia de que el dato de AMLO es en tan solo 4 años, faltan 2 más con lo que se espera que supere a todos los presidentes anteriores. Morena es, por tanto, un fracaso y no sabe gobernar.
Cuarto, los beneficiarios de las tarjetas del Bienestar pueden estar agradecidos con el gobierno federal por recibir dinero; sin embargo, lo que no les dicen es el efecto negativo que ha resultado de desmantelar la inversión pública diversificada, que ha frenado el desarrollo; tampoco le dicen al pueblo que con esas políticas han sólo beneficiado a las grandes empresas, pues una vez que la gente se gasta su apoyo en comida, en transporte y comunicaciones, queda igual de pobre, mientras los ricos dueños de las empresas de esas áreas, ven engrosar sus bolsillos; y lo peor, es que ahora el pueblo enfrenta una mayor inflación, de tal suerte que queda peor que como estaba antes de recibir el apoyo del gobierno. Mal negocio.
Ahora bien, en el caso del Estado de México, se ha documentado que la candidata de Morena desvió recursos públicos para fines partidistas cuando fue presidenta municipal de Texcoco y se sancionó esa conducta; pero también, como secretaria de Educación, la Auditoría Superior de la Federación observó incongruencias por 800 mil millones de pesos en donde había empresas contratadas cuyos domicilios estaban en terrenos baldíos en Texcoco. Además, una consecuencia del mal manejo del programa La Escuela es Nuestra, que estuvo un tiempo a su cargo, fue la reciente caída de un techo mal construido a la conserje de la escuela que casi le quita la vida, por suerte no había niños de preescolar en clases, si no, estaríamos posiblemente lamentando vidas de menores. A la señora la dejaron abandonada: los responsables del programa del gobierno federal no se hicieron cargo de los gastos de la señora, la dejaron a su suerte y si se le cayó el techo, ello se debe a la falta de supervisión, a creer que por ahorrarse unos pesos se pueden hacer obras de calidad y con los requerimientos técnicos adecuados; sin embargo, la realidad supera los buenos deseos, las buenas intenciones. Morena no sabe gobernar.
Por ello, la ciudadanía debe reflexionar su voto, pues apoyar a Morena, además de fomentar el autoritarismo, se alienta a la corrupción, a la falta de resultados en favor de las colonias marginadas, se desmantelan todos aquellos avances que favorecen al pueblo, pero que son obra de los gobiernos pasados. Son, en ese sentido, anarquistas los gobernantes de Morena, pues son expertos en destruir, pero muy malos en construir.
Sólo hay dos opciones en el Estado de México, y ambas son mujeres con lo que se garantiza que, por primera vez, las riendas de este importante estado quedarán en manos de una mujer. Ahora bien, como Morena sólo ha trabajado en la destrucción del país, es necesario un proceso de reconstrucción que inicia con el Estado de México y, en ese sentido, la opción profesional, con capacidad y con decisión a prueba de todo es Alejandra del Moral Vela. Morena no ha atendido las necesidades de la gente más humilde ahí donde gobierna, entre los municipios que hay que mencionar está Texcoco, por el contrario, nos han atacado, calumniado y mal tratado, por ende, los antorchistas agraviados, conscientes y dispuestos, tenemos que ponerle un alto a Morena, así conviene a los intereses del pueblo del Estado de México.
[1] AIFA: Esta es la cantidad de vuelos diarios que operó el nuevo aeropuerto (elceo.com)
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