MOVIMIENTO ANTORCHISTA NACIONAL

REPORTAJE | Aumentan las adicciones entre jóvenes mexiquenses

image
  • La disponibilidad, el bajo costo y la falta de estrategias efectivas han normalizado el consumo de cristal entre estudiantes de secundaria y preparatoria en municipios clave del Estado de México

En el Estado de México actualmente hay un millón 516 mil 956 jóvenes que estudian los grados de secundaria y preparatoria.

Una de ellas es Eloísa R., de dieciséis años, quien ya conoce cómo se corta el cristal, hielo, ice, tiza, crank, meta o cricop, como comúnmente le llaman. En su salón de clases ha visto cómo lo hacen sus amigos; dice que para ellos “es normal” y que aseguran que “sólo es por un tiempo”, pues no se sienten atrapados en la drogadicción. Sin embargo, evaden su realidad: “se atontan y se ríen por todo”.

“En mi salón somos 47 estudiantes y sólo seis no inhalamos el cristal; todos lo hacen, aprovechan las horas en que no viene un maestro, las horas libres”

Una de sus amigas, agregó, desde los trece años consume cristal; lo hace porque se siente sola. Su padre la abandonó, su madre trabaja todo el día y sus dos hermanos mayores la ignoran. Tiene todo el tiempo para hacer lo que le guste.

Otra de ellas lo hace sin que sus padres se den cuenta. Otras dos amigas, más grandes que ella, dicen que ya pasaron por eso y que en esta etapa de su vida la han dejado.

“En mi salón somos cuarenta y siete estudiantes y sólo seis no inhalamos el cristal; todos lo hacen, aprovechan las horas en que no viene un maestro, las horas libres, se van a las canchas o a los baños, se les nota por los ojos rojos”, mencionó.

“En todas las escuelas hay quien la vende, en todas se consume droga”, denunció José Roberto N., alumno del último semestre de preparatoria en Nicolás Romero.

La Secretaría de Salud reconoce que un gramo de cristal-metanfetamina cuesta menos de cien pesos y se consume en todos los estratos sociales. De acuerdo con las cifras de la Encuesta Nacional de Consumo de Drogas, Alcohol y Tabaco (Encodat 2016-2017), una de cada dieciséis personas de entre doce y diecisiete años había consumido alguna droga en el país hasta el 2016, fecha en que se realizó la última encuesta.

En 2024, el presidente de la Unión Nacional de Padres de Familia Comité Estado de México denunció que en la entidad mexiquense se ha observado un incremento en el consumo de drogas entre los menores de edad de los doce a los diecisiete años.

De acuerdo con el Instituto Mexiquense contra las Adicciones, desde el 2009 el consumo de estupefacientes ha crecido de manera considerable en la zona conurbada con la capital del país, siendo los municipios de Ecatepec, Nezahualcóyotl, Cuautitlán Izcalli, Naucalpan, Tlalnepantla, La Paz, Chimalhuacán, Chalco, Valle de Chalco y Toluca los que presentan mayores problemas de consumo de alcohol y drogas.

Para combatir el consumo y aumento de sustancias ilícitas entre los estudiantes, el gobierno estatal, a través de los planteles escolares, ha instrumentado la campaña de concientización llamada “Si te drogas te dañas”, además de la prevención a través de la educación, la activación física, la cultura y la participación comunitaria; sin embargo, esa campaña no impacta a los estudiantes: para ellos es normal su uso.

Las pláticas con los padres de familia, la vigilancia de la policía municipal o estatal a la entrada y salida de los planteles, así como los operativos “Mochila Segura”, no evitan que los estudiantes consuman el cristal: “cuando hay operativo, el que lleva alguna sustancia la ingiere rápidamente, con ello evita que la encuentren o la olfateen los perros”, indicó Eloísa.

Dentro de las policías municipales existe un departamento encargado de la prevención y combate contra las adicciones que se enfoca en la prevención del delito. Pero este departamento, dirigido por policías que a la vez son psicólogos, lo único que hace es responsabilizar a los padres del consumo de sus hijos y advertirles que desde el 2005 la ley cambió y hoy en día los niños y jóvenes desde los doce años son sujetos a fincarles delitos y a procesarlos legalmente para que purguen su condena en el centro de rehabilitación “Quinta del Bosque”, en el municipio de Zinacantepec, denunció Isabel N., madre de familia.

“Ahora resulta que somos los culpables, pero la música, las redes sociales, el cine, todo, incitan a nuestros hijos a beber, tener relaciones sexuales y a drogarse porque es la moda; pero el gobierno no hace nada para que no haya drogadicción entre nuestros hijos”, acusó.

Al respecto, organizaciones sociales como el Movimiento Antorchista, señaló Héctor Javier Álvarez Ortiz, dirigente del antorchismo en Nicolás Romero, advierten que para atacar el problema de fondo se debe transformar la realidad de la juventud, cambiar la base económica por otra más humana en la que se destinen más recursos para la alimentación, educación, cultura y recreación que garanticen la formación de los jóvenes en hombres nuevos que participen activamente dentro del desarrollo de la comunidad.

0 Comentarios:

Dejar un Comentario

Su dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados *

TRABAJOS ESPECIALES

Ver más

FOTO DEL DÍA